La USAF inicia pruebas en tierra con drones de combate colaborativo YFQ-42A y YFQ-44A
La división del Departamento de Defensa (DoD) ha confirmado que ha dado inicio a una serie de ensayos con los vehículos de prueba representativos de las aeronaves no tripuladas de combate colaborativo YFQ-42A y YFQ-44A.
Objetivos de las pruebas
Estas pruebas tienen como objetivo realizar evaluaciones rigurosas de los drones, las cuales se enfocarán en:
- La capacidad de los drones para realizar misiones de combate en entornos hostiles.
- La capacidad de los drones para trabajar en colaboración con otras aeronaves no tripuladas y tripuladas.
- Lafidabilidad y seguridad de los sistemas de navegación y comunicación de los drones.
Según fuentes cercanas al proyecto, las pruebas se desarrollarán en diferentes entornos y condiciones climáticas, con el fin de simular diferentes escenarios de combate.
Siguiente paso
Una vez finalizadas las pruebas en tierra, se prevé que los drones YFQ-42A y YFQ-44A sean sometidos a pruebas de vuelo, donde se evaluará su rendimiento en condiciones de vuelo.
Impacto en el sector
La entrada en servicio de estos drones de combate colaborativo podría revolucionar la manera en que se luchan las guerras, permitiendo a las fuerzas armadas dispongan de una mayor capacidad de respuesta y precisión.
Finalmente, es importante destacar que estos drones sean diseñados para ser empleados en colaboración con otros sistemas de armas, lo que permitirá una mayor flexibilidad y capacidad de adaptación en el campo de batalla.
En conclusión, la entrada en servicio de estos drones de combate colaborativo YFQ-42A y YFQ-44A representa un importante avance en la tecnología militar y abre las puertas a nuevas posibilidades en el combate aéreo.
Enjambres de drones y autonomía avanzada
El programa Replicator del Pentágono busca desplegar miles de drones autónomos y de bajo costo en múltiples dominios (aéreo, terrestre, marítimo) para agosto de 2025. Estos drones están diseñados para operar en masa, abrumando las defensas enemigas mediante volumen, coordinación y autonomía basada en inteligencia artificial .
Además, la Fuerza Aérea está desarrollando enjambres de drones que pueden «comunicarse» entre sí para coordinar ataques. El Laboratorio de Investigación de la Fuerza Aérea (AFRL) se enfoca en este tipo de tecnologías para mejorar la eficacia en el campo de batalla .
Plataformas de lanzamiento y despliegue
La Fuerza Aérea está explorando el uso de aviones de reabastecimiento KC-135 como plataformas para lanzar enjambres de drones. Esta estrategia permitiría desplegar drones en masa desde aeronaves existentes, ampliando las capacidades operativas sin necesidad de desarrollar nuevos vehículos de lanzamiento .
Integración con aeronaves tripuladas
El concepto de Manned-Unmanned Teaming (colaboración entre aeronaves tripuladas y no tripuladas) está ganando tracción. El programa Collaborative Combat Aircraft (CCA) busca desarrollar drones que actúen como «compañeros de ala» para cazas como el F-35, proporcionando apoyo en misiones de reconocimiento, guerra electrónica y ataques coordinados .
Desafíos y consideraciones éticas
A medida que se integran más drones autónomos en las operaciones militares, surgen desafíos relacionados con la identificación de aliados y enemigos en el campo de batalla. El Cuerpo de Marines de EE. UU. está trabajando en métodos para distinguir entre drones amigos y enemigos, especialmente en entornos de combate complejos .
Además, la incorporación de inteligencia artificial en sistemas de armas plantea cuestiones éticas sobre la toma de decisiones autónoma en situaciones de combate. Es esencial establecer marcos normativos y protocolos claros para garantizar el uso responsable de estas tecnologías.
En resumen, la Fuerza Aérea de EE. UU. está invirtiendo en tecnologías de enjambres de drones y autonomía avanzada para mejorar su capacidad operativa y adaptarse a los desafíos del futuro campo de batalla